Arturo Pérez de Lucia: «La movilidad eléctrica debería ser un proyecto de Estado»

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Entrevista a Arturo Pérez de Lucia, Gerente de AEDIVE, para el portal www.merca2.es

La electrificación del parque móvil español, la movilidad sostenible y los retos a los que se enfrentan empresas y sociedad para alcanzarla son temas candentes que requieren el esfuerzo conjunto de administraciones públicas y empresas privadas. Para analizar la situación actual de este asunto, MERCA2 ha entrevistado al CEO de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (AEDIVE), Arturo Pérez de Lucia.

–Con la campaña electoral a la vuelta de la esquina, ¿los partidos políticos apuestan por la movilidad eléctrica?

En general, los partidos políticos apuestan por una nueva movilidad que sin duda tiene que ser diferente a la que se ha venido implementando en las últimas décadas, en especial en entornos urbanos. Una movilidad en donde se otorgue mayor importancia al transporte público, a la recuperación de los espacios públicos para el ciudadano, a la intermodalidad, a la implementación de nuevas soluciones de movilidad y, además, que esa movilidad sea limpia de emisiones y amigable con el medio ambiente y la salud de los ciudadanos.

A la vez, esa nueva movilidad está ligada a la innovación, donde el vehículo eléctrico es un eje de esa transformación, pero donde existe también una revolución en cuanto a los procesos de industrialización a través de la robotización, de la industria 4.0 y de nuevas tecnologías como el vehículo conectado y autónomo. Esta es la primera vez que España puede llegar a tiempo de liderar una revolución industrial y tecnológica y los partidos políticos son conscientes de que esa oportunidad hay que aprovecharla para seguir siendo líderes en el sector, generando competitividad y empleo.

El gurú que acuñó el término marketing experiencial quizá pretendía trasladar a cualquier producto lo que una persona siente al conducir un Mercedes-Benz. Cuatro…

En cualquier caso, lo que más nos preocupa de la movilidad eléctrica es que corra el riesgo de convertirse en una herramienta de posicionamiento partidista o de ideología política, cuando debería de ser un proyecto de Estado, no sujeto a colores y teniendo en cuenta que forma parte de una revolución industrial, tecnológica y de servicios en la movilidad que se está produciendo a nivel global y a la que España ni puede, ni debe ser ajena.

–Desde AEDIVE, ¿qué piden a los partidos con mayor urgencia?

Acuerdos de Estado, una visión global de la movilidad que tenga como foco la realidad de una revolución industrial, tecnológica y de servicios que va a afectar a la industria, al empleo y a la competitividad y que, si no se acomete con ambición y asumiendo la realidad de esta transformación, nos va a acabar afectando y mucho. En este sentido, pedimos que el concepto de sostenibilidad, de descarbonización del transporte y de economía circular no sea patrimonio de ningún partido político o más bien, que lo sea de todos, con independencia de las ideologías. Es algo que va mucho más allá de estrategias de gobierno. Hay un mandato de la Comisión Europea a 2050, un compromiso en la firma de los Acuerdos de París y sobre todo, una deuda con la propia sociedad, que reclama un aire limpio y respirable y una movilidad ecoeficiente.

En lo que atañe a la movilidad eléctrica, que se acometa de una vez una reforma fiscal que ponga el foco en la descarbonización del transporte, pues es lo que se nos exige desde hace años en Europa. Que se planifique un sistema de incentivos coherente, ambicioso, estable y continuado en el tiempo para dar carpetazo a este sistema de ayudas a la compra de vehículos e infraestructura que desde hace años lleva acometiéndose en España con un escaso éxito, generando distorsiones en el mercado.

Asumir reformas en la ley del sector eléctrico como el término de potencia, que es un impuesto que lo único que logra es desincentivar la inversión privada en el desarrollo de infraestructuras de recarga y hace inútil cualquier intento de eficiencia energética por parte del usuario debido a lo que se paga por término fijo.

–¿Qué pasa con el Plan Movalt? ¿Hasta qué punto es necesaria las ayudas a la compra de vehículos eléctricos?

Las ayudas a la compra de vehículos eléctricos siguen siendo necesaria, pero debe de realizarse de forma eficiente y atendiendo a criterios basados en una reforma fiscal verde que incentive a la compra de este tipo de vehículos y penaliza la adquisición de los más contaminantes. Las ayudas del Plan Moves, cuya orden de bases se ha publicado, son el resultado de aprovechar un presupuesto que ya estaba aprobado, pero desde luego no es la fórmula que debe seguir rigiendo a la hora de incentivar la compra de vehículos cero emisiones. Ahora habrá que esperar dos meses a que las comunidades autónomas lancen sus propios planes como parte del Plan Moves y eso creará nuevamente distorsiones e incertidumbres en el mercado.

–¿En qué situación se encuentran las empresas españolas para ofrecer productos y servicios que impulsen la movilidad eléctrica?

En España hay un tejido industrial, tecnológico y de servicios en torno a la movilidad eléctrica muy interesante y desde luego mucho más desarrollado que en otros países. En nuestro país se fabrican furgonetas eléctricas en Galicia, Cataluña y País Vasco; motocicletas y scooters en Cataluña y Andalucía; autobuses y microbuses en Cataluña, País Vasco y Navarra e infraestructuras de recarga en diversas comunidades autónomas como Cataluña, Madrid, País Vasco, Navarra, Valencia…

Quizás, el gran reto sea disponer de una fábrica de baterías, que es el gran cuello de botella hoy en día de la movilidad eléctrica, puesto que la demanda está siendo cada vez mayor.

–Casi todas las marcas han anunciado mayor presencia de modelos eléctricos en su oferta. Sin embargo, la fabricación de baterías eléctricas emite gases contaminantes. ¿Cómo trabajan para solucionar este problema?

Partamos de la base de que cualquier proceso productivo en este mundo genera emisiones. La fabricación de las celdas de las baterías requiere de una gran cantidad de energía y la clave es la procedencia de esa energía. Actualmente, la producción de baterías está en manos de China, que se encuentra en medio de un proceso de transformación de su generación hacia las fuentes renovables.

Aun así, el creciente boom por la electromovilidad está demandando baterías más eficientes y con una mayor densidad energética, lo que disminuirá la presencia del cobalto en las baterías para dar paso a una mayor presencia del níquel, implicando una demanda creciente por el hidróxido de litio frente al carbonato de litio, que se extrae en China.

–¿Cuál considera que es el mayor escollo para los ciudadanos a la hora de comprar un coche eléctrico? ¿Autonomía? ¿Baterías? ¿Precio inicial? ¿Tiempo de recarga? ¿Puntos de recarga?

En mayor escollo es la falta de información o la infoxicación en torno al vehículo eléctrico. Hoy en día es una solución muy eficiente para más del 80% de la población, con vehículos de fabricantes tradicionales, más allá de las marcas Premium, que superan los 400 km de autonomía, cuando la mayoría de la población no hace más de 50 km diarios.

Todavía queda mucho por hacer, no obstante, para que se convierta en una alternativa factible para todos los usuarios, donde juega un papel fundamental la mayor disponibilidad de modelos eléctricos, la mejora y despliegue de infraestructuras de recarga públicas y los incentivos gubernamentales.

Los precios de los vehículos eléctricos van a ir siendo más competitivos, teniendo en cuenta que su componente principal, la batería, está reduciendo dramáticamente sus precios

Evidentemente, los precios de los vehículos eléctricos van a ir siendo más competitivos, teniendo en cuenta que su componente principal, la batería, está reduciendo dramáticamente sus precios (en 2009, el kWh estaba a 1.000 dólares y hoy ronda los 200 dólares, cuando los expertos auguran que en el entorno de los 100 dólares, el precio de un eléctrico con respecto a su espejo en combustión se equilibrará).

Por otro lado, los proyectos en desarrollo de infraestructuras de recarga pública auguran que para finales de 2019 podría haber un mallado básico de recarga rápida que elimine la ansiedad de autonomía en España.

–¿Se atrevería a pronosticar un año en el que todo el parque móvil español se impulse con motores eléctricos?

La electrificación del parque va a ser muy rápida y convivirán vehículos híbridos, junto con híbridos enchufables y eléctricos puros, por una simple cuestión de transformación industrial y tecnológica, que se está produciendo a escala global. Es complejo establecer una fecha concreta, igual que lo fue para la revolución de la telefonía móvil, aunque la Comisión Europea ya ha establecido el año 2050 para la descarbonización del transporte.

Lo que sí es cierto es que todos los fabricantes están trabajando intensamente en la preparación de sus líneas de montaje y en el desarrollo de sus nuevos modelos para que todos ellos estén electrificados en mayor o menor medida en el breve plazo, pero evidentemente, si contemplamos todos los modos de transporte rodado, incluido el de mercancías de larga distancia, seguirán varias décadas conviviendo diversas tecnologías junto con la electrificación, en cualquier caso, todas ellas con exigentes niveles de reducción de emisiones.

El coche eléctrico: ¿Evolución o Revolución?

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El debate sobre el coche eléctrico encierra elementos que nos remiten a escenarios más amplios: el futuro de las ciudades o la movilidad sostenible. Como telón de fondo, la apuesta por la descarbonización que conlleva un cambio en el paradigma energético internacional e impacta en una industria clave a nivel productivo en España. Los invitados a la mesa redonda organizada por Estrategias de Inversión y patrocinada por Alphabet coinciden en que se trata de un ámbito en el que la regulación juega un papel determinante a la hora de marcar los tiempos.

No hay marcha atrás. Los cambios normativos aprobados y los que lo serán tanto a nivel europeo como nacional bajo el paraguas global del cambio climático señalan un camino de cambio que, en el caso del transporte, trae consecuencias tanto micro como macroeconómicas, dado que hablamos, como recuerda Begoña Cristeto, socia de KPMG España, de una industria, la de la automoción, que representa el 10% del PIB español y da empleo a 300.000 personas. Por ello, Agustín Muñoa,  director de Vehículos Eléctricos, Movilidad y Conectividad de RENAULT IBERIA, señala la importancia de encontrar “puntos de encuentro para definir los papeles de lo público y lo privado y hacer posible la industria del futuro”.

Carlos Bergera, responsable de Relaciones Externas Smart Mobility de IBERDROLA, cita el término “transición” para definir el momento que vivimos y alude a la necesidad de acometerla para que la industria automovilística europea no quede obsoleta. “Para España todo esto representa una gran oportunidad”, afirma, “porque el sector eléctrico también es un una industria relevante y en la que somos líderes a nivel mundial en renovables. Es necesario que ambas dialoguen y que el sector del automóvil se adelante a los cambios, invirtiendo en innovación, para protegerse”. Una inversión que también se debe realizar en el ámbito energético porque, tal y como resalta Marina Serrano, presidenta de la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (AELEC) los objetivos de descarbonización “solo se pueden cumplir si hay un cambio en la movilidad hacia una mayor electrificación”.

Esta coyuntura, a su vez, genera nuevas oportunidades para los inversores de la mano de la llamada industria 4.0 vinculadas al desarrollo e innovación en campos como las energías renovables o el almacenamiento. “Supone”, en palabras de Arturo Pérez de Lucia, director gerente de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (AEDIVE), “una transformación profunda, sobre todo de la mentalidad con la que afrontamos los cambios. Conlleva una cooperación en competencia para avanzar dentro de un mercado que aún no está maduro”. Señala, además, la relevancia que, como en otros sectores, van ganando los servicios prestados frente al producto. En esa línea, Muñoa destaca la importancia de tener en cuenta “qué quiere el cliente y cómo se relaciona con nosotros” y alude al concepto de “movilidad a geometría variable, porque no es lo mismo moverse en Madrid que en un entorno rural”.

La necesidad de una “estrategia país”

La coyuntura geopolítica, unida a los acuerdos para la reducción de emisiones contaminantes y a los desarrollos de procesos fruto de la innovación son las tres grandes fuerzas que, según Cristeto, conforman un nuevo ecosistema en el que el sector debe definir dónde se quiere posicionar. En su opinión, en automoción “cada vez se trabaja a nivel geográfico más en islas; conectadas, pero islas, en las que cada uno desarrolla aquello que más le conviene. Estados Unidos sigue desarrollando motores de combustión y China, en cambio, se ha volcado en el coche eléctrico. En Europa nos estamos quedando en tierra de nadie”. Por ello aboga por una “estrategia país”, al margen de colores políticos, algo en lo que coinciden Pérez de Lucia, quien resalta que “las administraciones deben ser los drivers del cambio e impulsar unas políticas de Estado que no dependan del gobierno de turno” y Muñoa, que pide “un marco duradero y una política fiscal homogénea para crear un ecosistema que fomente la inversión”.

En esta misma dirección, Serrano defiende la existencia de unos objetivos “que permitan a los inversores tomar decisiones con estabilidad, con visión a largo plazo y la implicación de todos”. Para incentivar la demanda del coche eléctrico destaca la importancia de contar con una red amplia de puntos de recarga, algo que según las previsiones se puede lograr a finales de este año. Esa mejora de la infraestructura va a permitir, apunta Bergera, ahorrar mucho dinero como país por la reducción de la dependencia de los combustibles fósiles. En paralelo, cita el cambio que supone la digitalización en la relación con el usuario y destaca cómo afecta al sector eléctrico, que afronta el reto de una mayor descentralización.

Todos los estudios realizados, recuerda Serrano, muestran que el sistema, tanto en generación como en distribución, puede asumir el aumento de la demanda fruto del desarrollo del vehículo eléctrico. “Nuestro trabajo”, afirma Bergera, “está en dotar a la movilidad eléctrica de la infraestructura necesaria para que haga su papel en el cumplimiento de los objetivos fijados por la Unión Europea para reducir las emisiones contaminantes”. Implica un cambio psicológico en el que debemos ayudar a educar al ciudadano, dice Pérez de Lucia. “Vamos a ir acompañados de otras tecnologías”, concluye, “pero el potencial de inversión que se va a desarrollar en los próximos cinco años ligado a la movilidad eléctrica es brutal”.

Tal y como señala Cristeto, “en este sector eran los fabricantes los que decidían qué tecnología tenía fuerza. Ahora esa decisión depende del regulador” y Muñoa añade otro elemento al debate al referirse al concepto de movilidad de “nuestros hijos, que es distinto al nuestro. Tenemos que dar una respuesta eficiente a ese cambio”.

Patrocinado por Alphabet, compañía multimarca de renting, gestión de flotas y movilidad corporativa

AEDIVE arranca el Grupo de Trabajo de Vehículo Eléctrico, Conectado y Autónomo e integra a la AEVAC como miembro institucional

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El Director General de la DGT destaca el espíritu de colaboración entre ambas asociaciones y pone en el foco a la sociedad civil para resolver los retos de la movilidad del futuro

La Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico, AEDIVE, ha puesto en marcha hoy el Grupo de Trabajo de vehículo eléctrico, conectado y autónomo con una reunión en la sede de la DGT donde su Director General, Pere Navarro, ha destacado en su charla de inauguración la colaboración entre asociaciones sectoriales como un valor fundamental para el éxito en el desarrollo del mercado y para situar a España en la vanguardia industrial, empresarial y tecnológica en la movilidad de hoy y de mañana.

Esta reunión del grupo de trabajo ha supuesto igualmente la firma del convenio de colaboración entre AEDIVE y la AEVAC, Asociación Española del Vehículo Autónomo Conectado, que se integra en AEDIVE como miembro institucional para potenciar proyectos y actuaciones en torno a la movilidad autónoma y conectada.

Resulta inusual en España ver cómo asociaciones sectoriales suman esfuerzos conjuntos y apuestan por las sinergias en vez de trabajar de forma aislada y compitiendo, en vez de cooperando, por lo que esta alianza entre AEDIVE y la AEVAC augura resultados muy positivos para el mercado”, destacó Navarro en su charla inaugural.

Asimismo, el director general de la DGT ha destacado que “es la sociedad civil la que tiene que poner de su mano para resolver los grandes retos de la movilidad y las administraciones estaremos para darles todo el apoyo necesario, por lo que las asociaciones empresariales tienen un papel fundamental en el éxito de este objetivo”.

Cerca de un centenar de empresas se han reunido en este primer encuentro, incluyendo fabricantes y distribuidores de vehículos de 2 y 4 ruedas, de infraestructuras de recarga, empresas de distribución, compañías tecnológicas y administraciones regionales y locales, que han compartido un objetivo común en el interés por mantenerse a la vanguardia de los nuevos desarrollos ligados a la conducción eléctrica, conectada y autónoma.

Aitor-Fernández-Pte-de-AEVAC-y-Arturo-Pérez-de-Lucia-Dtor-Gerente-AEDIVE_AEDIVE_El presidente de la AEVAC, Aitor Fernández, ha destacado en su intervención que éste es el momento de impulsar un modelo de movilidad inteligente que garantice la igualdad de oportunidades para todas las personas, utilizando las tecnologías que brinda el vehículo autónomo y conectado. «Solo nos hace falta saber si España será capaz de recoger ese testigo o si dejará pasar la oportunidad«, comentó.

Por su parte, el director gerente de AEDIVE, Arturo Pérez de Lucia, afirmó que “la movilidad rodada está llamada a ser eléctrica, conectada, compartida y autónoma y, por tanto, debemos tener la visión de trabajar juntos compartiendo conocimientos y capacidades en un ambiente de coopetencia, sumando y no restando”.

Consorcios vinculados a las redes 5G, como el europeo 5g-MOBIX para la movilidad automatizada, cooperativa y conectada, en corredores fronterizos en Europa y Asia, o soluciones que alertarán en menos de 10 segundos de la aparición de un coche que circule en dirección contraria son algunos de los contenidos analizados en esta primera reunión del grupo de trabajo, donde también se ha informado del Congreso y Exposición S-Moving. Smart, Autonomous and Unmanned Vehicles Forum, en cuyo comité organizador se encuentra AEDIVE y que se celebrará en Málaga el 17 y 18 de octubre como espacio de referencia para los actores de toda la comunidad relacionada con el movimiento inteligente.

PIES DE FOTO

  1. El director general de la DGT, Pere Navarro, en su discurso inaugural del grupo de trabajo junto al director gerente de AEDIVE, Arturo Pérez de Lucia
  2. EL presidente de la AEVAC, Aitor Fernández, y el Director Gerente de AEDIVE, Arturo Pérez de Lucia, firman el convenio de colaboración y la integración de la AEVAC como miembro institucional de AEDIVE

«Quedarse al margen de las oportunidades del coche eléctrico es quedarse al margen de la competitividad»

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EMPRENDEDORES – ENTREVISTA CON ARTURO PÉREZ DE LUCIA Director gerente de Aedive

EMPRENDEDORES: Dicen que el mercado del coche eléctrico no termina de despegar por su precio y la falta de infraestructuras…

Arturo Pérez de Lucia: No es cierto que el mercado del vehículo eléctrico no esté terminando de despegar. De hecho, las matriculaciones crecen exponencialmente cada año con respecto al ejercicio anterior. Hay que tener en cuenta que estamos hablando de un mercado disruptivo no tanto a nivel tecnológico, pues el vehículo eléctrico existe desde hace más de cien años, sino a nivel de implementación social. Todo mercado disruptivo tiene una curva de penitencia, hasta que se comprende y hasta que se adecúa a los requerimientos del mercado en cuanto a tecnología y precio, tras la cual, la línea de crecimiento es vertical hacia arriba. Lo mismo pasó con otras tecnologías como el teléfono móvil, que tardó quince años en superar ese valle a nivel comercial, o el ordenador portátil.

Dicho esto, es cierto que la movilidad eléctrica está teniendo un crecimiento en España más lento que en otros países, en especial con respecto a Europa del norte y central, por razones varias. Para mí, la principal barrera es el desconocimiento sobre el vehículo eléctrico por parte de la sociedad, que piensa que todavía no hay vehículos en el mercado, cuando el portafolio está creciendo constantemente y ya todos los fabricantes tienen modelos en el mercado o planes para presentarlos en el breve plazo, o que los eléctricos no tienen prestaciones ni capacidades suficientes, lo que tampoco es cierto. Además, tenemos retos tecnológicos por delante, como un incremento en las capacidades de las baterías que permitan mayores rangos de autonomía, aunque ya hay vehículos eléctricos de fabricantes tradicionales, al margen de gamas Premium, con autonomías reales por encima de los 300 kilómetros, que están muy por encima de las necesidades en movilidad de la mayor parte de la población, que no realiza diariamente más de 50 o 60 kilómetros. Además, necesitamos que haya un despliegue eficiente de infraestructuras de recarga pública, en especial rápida, que permita garantizar a los usuarios de vehículo eléctrico la posibilidad de realizar desplazamientos de largo recorrido sin que sufran ansiedad de autonomía. Ese despliegue se está produciendo ya, aunque necesitamos ampliar el mallado.

Por último, los retos de la Administración pasan pro un plan de incentivos coherente, continuado en el tiempo y ambicioso en lo económico para dar respuesta a la creciente demanda de este tipo de vehículos, y un marco regulatorio que elimine barreras como la de la figura del gestor de cargas para facilitar el despliegue de infraestructuras de recarga púbicas.

Al precio que están hoy los coches eléctricos, ¿cuánto tardaríamos en amortizar ese sobrecoste por el ahorro que supone frente al vehículo de combustión?

El coste de los vehículos eléctricos es algo que aún no se entiende. Mucha gente piensa que el coche eléctrico es más caro, pero lo cierto es que no hay actualmente en vehículo nuevo un eléctrico por debajo de 15.000 euros. Sin embargo, cuando analizas el precio de un eléctrico has de compararlo con su espejo en combustión, incorporando además en el de combustión todas las innovaciones tecnológicas que tienen los eléctricos. Cuando se hace esa comparativa, el diferencial de precio se reduce sustancialmente, a lo que hay que añadir las ayudas que ofrece el Estado para la compra de eléctricos. Además, claro, hay que tener en cuenta que el precio no es el único coste de un vehículo. Cuando sale del concesionario y durante su vida útil hay una serie de costes recurrentes (combustible, mantenimientos, parking, etc..) en donde el vehículo eléctrico demuestra su verdadera eficiencia y ahorro. Ya hay vehículos eléctricos que tienen un precio con ayudas casi similar a su espejo en combustión. Si se suman esos ahorros en la vida útil, la amortización del coste podría llegar en uno o dos años.

¿Qué previsiones tienen sobre el desarrollo de ese mercado a corto, medio y largo plazo?

Las previsiones son de crecimiento exponencial y las cifras, aunque cuantitativamente no son grandes aún, cualitativamente indican que la movilidad eléctrica está calando como una solución eficiente para la movilidad rodada entre empresas, particulares y administraciones. Los próximos tres años van a ser cruciales en el desarrollo de la movilidad eléctrica, no solo porque hay que cumplir unos objetivos medioambientales que vienen marcados por Europa y por la necesidad de las ciudades de reducir las emisiones contaminantes, sino también por el salto tecnológico que permitirá dar respuesta a los retos comentados y que definirá un camino en la movilidad rodada hacia el vehículo eléctrico, conectado, compartido y autónomo. Además, hay que tener en cuenta que el vehículo eléctrico es mucho más que un concepto de movilidad sostenible donde su utilidad se basa en la reducción de los gases de efecto invernadero y de las emisiones contaminantes y acústicas que tanto afectan a la salud. Es también un concepto de eficiencia energética en el que la integración de las energías renovables, la generación distribuida, el almacenamiento energético y el autoconsumo serán claves en un mundo en el que vamos hacia ciudades inteligentes gestionadas con redes inteligentes de energía.

He leído una declaración tuya en la que dices que el coche eléctrico puede ser la solución para que el sector del taxi pueda competir con Uber y Cabify, pero estas empresas también pueden funcionar con coches eléctricos…

Cierto, de hecho, existen soluciones de VTC con vehículos eléctricos y creo que esa es la diferenciación que debe aportar este tipo de flotas como servicio de valor añadido a sus clientes. En cualquier caso, el argumento respecto a mi declaración se basa en que un taxi eléctrico supone para el profesional un ahorro real de entre 5.000 y 8.000 euros anuales con respecto a un taxi de combustión, tal y como han declarado algunos taxistas que han hecho este cambio, apostando por un taxi eléctrico. Al final, el taxista puede obtener más ingresos por la vía de una mayor facturación o por la vía del ahorro y es esta última la que aporta el cambio tecnológico al taxi eléctrico, ofreciendo una mayor calidad de vida al taxista.

Cambiando de tercio, una pregunta que seguro esperan nuestros lectores: ¿qué oportunidades ve para emprender en este mercado?

La movilidad eléctrica está llamada a ser un polo de innovación y, por tanto, de generación de empleo importante. Ya se conocen los nuevos modelos de negocio asociados al vehículo eléctrico como los sharing de bici, coche y moto, que hace años eran impensables y hoy en día son parte fundamental de una estrategia de movilidad urbana sostenible. Además, como señalaba antes, la movilidad eléctrica es también eficiencia energética y de ahí surgen nuevos modelos de negocio asociados a la entrega de electricidad para la alimentación de los vehículos. Estamos en un momento de transformación en todos los niveles y el vehículo eléctrico forma parte de esas nuevas estrategias que van a conformar el modelo económico de mañana. Cambiará la forma y los canales con los que adquirimos los vehículos. Cambiarán los criterios de uso y propiedad (de hecho ya lo está haciendo). Se transformarán sectores como el de los talleres, los seguros e, incluso, las escuelas de conducción.

Y a todo ello se suman las tecnologías de la información y la comunicación, en un momento del sector de la automoción en la que el coche conectado es ya una realidad y el vehículo autónomo va adquiriendo cada vez más cuerpo.

En cualquier caso, lo importante es que quedarse al margen de estas oportunidades que surgen en torno al vehículo eléctrico es quedarse al margen de la competitividad y el empleo y, desde el punto de vista industrial y tecnológico, esa realidad es evidente y se contempla como un escenario hacia el que hay que trabajar.

Más PIB, menos CO2 y 23.000 empleos «extra»: así sería una España «enchufada» al coche eléctrico

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Un estudio afirma que tendría un impacto positivo en la economía al reducir la dependencia energética y desplazar la actividad económica a sectores intensivos en empleo

Un futuro en el que todos los vehículos que circulen por las carreteras españolas sean eléctricos, híbridos o de pila de combustible. Es el punto de partida del estudio «Repostando hacia el futuro», liderado por la consultora Cambridge Econometrics coordinado por las ONG Transport & Environment y ECODES, que afirma que la adopción generalizada de este tipo de vehículos permitiría a España no solo mejorar la calidad del aire sino también incrementar su PIB y crear empleo.

El trabajo, en el que han participado, entre otros, la alianza Renault Nissan -tercer fabricante mundial de vehículos-, la asociación para el impulso del vehículo eléctrico Aedive o Iberdrola, asegura que la transición hacia los vehículos eléctricos incrementaría el PIB en 3.191 millones de euros, debido fundamentalmente a la reducción en las importaciones de petróleo. Además, se crearían más de 23.000 empleos, en el sector servicios, el sector energético y, a corto y medio plazo, en la fabricación de vehículos y sus cadenas de suministro; y la actividad económica se desplazaría de sectores poco intensivos en empleo, como la producción de carburantes -2 empleos por cada millón de valor añadido- a otros que requieren de más fuerza laboral -como la producción de energía e hidrogeno, con 7,9 empleos por millón-.

«El transporte juega un papel fundamental en el cambio climático», afirmó Valvanera Ulargui, directora de la Oficina Española de Cambio Climático, durante la presentación del estudio. Ulargui defendió la tesis de los responsables del estudio de que la descarbonización -la eliminación progresiva de los combustibles fósiles- «presenta más oportunidades que riesgos» y avanzó que la futura Ley de Cambio Climático, que se presentará en breve junto con el Plan Nacional de Energía y Clima, «posicionará a España como referente en el modelo sostenible, el único viable de cara al futuro».

La electrificación del parque permitiría la reducción de un 27,8% de las emisiones de CO2 a la atmósfera en 2030, y de un 91,6% en 2050. Al mismo tiempo, las emisiones tanto de partículas como de óxidos de nitrógeno se reducirían en un 89% a mediados de siglo. Ello en el caso de que se cumpliera la hipótesis con la que trabajan, que incluye la paulatina adopción de vehículos híbridos, híbridos enchufables, eléctricos puros y de hidrógeno en 2030, de manera que estos fueran únicamente los vendidos en 2050.

Eléctricos competitivos en 2025

En este escenario optimista para los vehículos alternativos, los eléctricos serían más competitivos que un gasolina a partir del año 2025, teniendo en cuenta todos los costes. Ello en un escenario de precios del combustible «alto» (un 25% superior al actual). Hacia 2030, los responsables del estudio consideran que éste podría batir también a los diésel, y convertirse entonces en la opción más competitiva, incluso sin tener en cuenta costes como las exenciones en los impuestos de matriculación y circulación o en los costes de aparcamiento en las grandes ciudades.

En este sentido, un vehículo eléctrico podría ahorrar en 2030 hasta 1.400 euros al año al consumidor en combustible y mantenimiento, lo que, según los investigadores, «compensaría ampliamente el posible mayor coste inicial en la compra del vehículo».

Inversiones

No obstante, en lo referido a los retos pendientes, que hacen que a día de hoy este tipo de vehículos solo supongan el 0,6% de las ventas totales, tanto los responsables del trabajo como los fabricantes de automóviles coinciden en resaltar la necesidad de realizar inversiones tanto en la red de recarga como en la infraestructura eléctrica. Hace pocos días, la patronal europea de productores de vehículos, ACEA, cargó contra los objetivos de emisiones impuestos por la Unión Europea, del 15% para el año 2025 y del 30% para el 2030 en comparación a los niveles que se registren en 2021.

«Son simplemente inalcanzables», aseguró su secretario general, Erick Jonnaert, que consideró indispensable que para su realización se multiplique por 20 la cifra de puntos de recarga, unos 100.000 actualmente en todo el territorio europeo. Para ello, los fabricantes piden la implicación de las administraciones, así como mayores ayudas por parte de las administraciones para la adquisición de estos vehículos. Según sus datos, la cuota de mercado de coches eléctricos es cercana al 0% en países con un PIB per cápita inferior a 18.000 euros; y una cuota de mercado de eléctricos superior al 1,8% tan solo se da en países con un PIB per cápita superior a 35.000 euros.

Según el estudio, España requeriría una inversión de 3.946 millones de euros hasta 2030 para erigir suficientes puntos de recarga: un punto residencial o en el centro de trabajo por cada vehículo eléctrico, dos en zonas urbanas por cada diez eléctricos en circulación y, en autovías, uno por cada 500 vehículos. Esta cuantía correría a cargo del consumidor final «como parte del coste del vehículo eléctrico».

A corto plazo, no obstante, Juan Luis Pla, de Nissan, pidió «no demonizar ciertas tecnologías, porque puede ser el remedio que la enfermedad», haciendo alusión al incremento de las emisiones de CO2 por el aumento de ventas de vehículos de gasolina en detrimento del diésel. «La evolución tiene que ser lógica y razonable», aseguró.

La presentación se produjo un día antes de la polémica desatada por las palabras de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, que aseguró que el diésel tiene «los días contados». Una aseveración a la que la industria, a través de Anfac, contestó recordando que 40.000 empleos y 17 fábricas de automóviles dependen de forma directa en España de este combustible. En las plantas españolas se fabrican 1,2 millones de vehículos de este combustible, de un total de 2,8 millones. «Los fabricantes están preparados para adaptarse, pero se necesita una transición ordenada», explicó su vicepresidente, Mario Armero.

Aunque sus ventas, junto con los híbridos, se han incrementado un 46% en los primeros cinco meses del año, solo suponen el 5,8% de las matriculaciones, por el 37,0% del diésel y el 57,2% de los gasolina. Además, de los más de 40 modelos que se fabrican en nuestro país, solo 5 son eléctricos.

Impuestos al diésel

De forma paralela al estudio de Cambridge Econometrics, la agrupación de ONGs ecologistas en Bruselas, Transport & Enviroment, presentó también un informe con recomendaciones para la reducción de gases de efecto invernadero en el sector del transporte. «España está bien encaminada para cumplir los objetivos de 2020. El problema es a partir de 2020, cuando tendrá que reducirlas en un 26 adicional», explicó Carlos Calvo, delegado de T&E en España.

En este sentido, la asociación pidió al Ejecutivo español que iguale el tipo impositivo del gasóleo con el de la gasolina, algo en lo que el ejecutivo podría ya estar trabajando. También pidió medidas como unificar la tarificación vial, incluyendo en los peajes los costes de la contaminación atmosférica y acústica para penalizar a los vehículos que más polucionan, además de fomentar el vehículo compartido e invertir en el transporte público para hacerlo más atractivo.

El reto de cambiar de hábitos eléctricos

La electrificación del parque no implicaría la necesidad de grandes reformas en el sector eléctrico, pero sí sería necesario un cambio de hábitos por parte de los usuarios. En 2050, con un parque totalmente «alternativo», la demanda final de electricidad crecería apenas un 6%, lo que permitiría, según los autores del estudio, gestionar fácilmente las inversiones necesarias hasta entonces para adaptar la infraestructura. El problema lo supondrían la carga en momentos puntuales u horas pico de gran parte de los vehículos a la vez, lo que supondría picos «significativos» de demanda eléctrica por la tarde, lo que requeriría fuertes inversiones para reforzar las redes de distribución. Por ello, los investigadores proponen adoptar una estrategia de «carga inteligente», en la que cada usuario decida cuándo recargar su vehículo en función de la oferta y la demanda eléctrica y, consecuentemente, del precio. Aquí también jugaría un importante papel la tecnología Vehicle to Grid (V2G), ya existente, y que transforma a los automóviles eléctricos en baterías móviles que permiten almacenar energía de la red cuando esta es más barata y devolver los excedentes en momentos de fuerte demanda.

 

Smart y Endesa inauguran la primera red de carga pública para poder recorrer Ibiza en coche eléctrico

smart y Endesa inauguran la primera red de carga pública para poder recorrer Ibiza en coche eléctrico

Han inaugurado una nueva red de recarga semirrápida en Ibiza vinculada a la aplicación ecaR: cinco cargadores estratégicamente situados para circular por toda la isla sin miedo a quedarse sin batería

Endesa y Smart han desplegado en Ibiza una nueva red de recarga semirrápida para vehículos eléctricos que permite circular completamente con cero emisiones por la isla sin miedo a quedarte sin batería, gracias a que los cargadores además están alimentados por energía de origen renovable. Son cinco cargadores de 22kW, con dos puestos cada uno, en los que cargar del 10 al 80% la batería del Smart EQ requiere menos de 40 minutos o en los que una recarga de 15 minutos le otorgan una autonomía extra de unos 40 km. Adicionalmente, para los usuarios de vehículos Smart EQ, la recarga en esta red de carga pública será gratuita.

El acto inaugural de la nueva red ha tenido lugar esta mañana en el Ushuaïa Ibiza Beach Hotel y ha contado con la presencia del presidente de Mercedes-Benz España, Roland Schell, y del director general de Endesa X, Josep Trabado.

Para Roland Schell “Liderar la transición del motor térmico al vehículo eléctrico es una de las prioridades fundamentales de Mercedes-Benz Cars. De hecho, la firme apuesta de Smart por esta tecnología es tal que a partir de 2020 sólo ofrecerá vehículos de propulsión eléctrica en Europa. Proyectos como el que hoy presentamos de la mano de Endesa son clave para integrar esta tecnología en los hábitos de movilidad de la sociedad”.

Por su parte, Josep Trabado ha afirmado que “Endesa está firmemente comprometida con el despliegue del vehículo eléctrico, aportando una infraestructura de recarga inteligente y suministrando energía limpia para los nuevos automóviles libres de emisiones. Ello va a favorecer una mayor eficiencia del sistema eléctrico y una mayor penetración de las energías renovables. Contamos con una amplia experiencia en el desarrollo y la gestión de infraestructura de recarga y la puesta en marcha de esta red en Ibiza es un paso más para que el vehículo eléctrico sea una realidad cada vez mayor.  Es fundamental romper la barrera de entrada que supone el miedo a quedarse sin batería, y vamos a instalar 600 puntos de carga de acceso público en tres años. Además, contar con socios como Smart y el Grupo Palladium en este camino es, sin duda, todo un privilegio”.

Dentro de la filosofía de ofrecer al cliente un alto estándar de calidad en un marco sostenible, tanto de sus productos como de sus servicios, el Ushuaïa Ibiza Beach Hotel tiene instalados cuatro cargadores para atender las recargas de la flota de 25 Smart EQ que el hotel utiliza para la movilidad de clientes (servicio incluido en las habitaciones superiores).

Todos los cargadores que se pueden encontrar en la isla son universales de 22 kW. El usuario solo debe descargarse la aplicación gratuita del club Endesa ecaR (disponible en Google Play y en la App Store de Apple) para empezar a disfrutar de su experiencia con la movilidad eléctrica de forma fácil, sencilla y sin preocupaciones.

La aplicación ecaR es una iniciativa pionera que Endesa puso en marcha en Mallorca en 2015, y que, ahora, con la experiencia y el éxito obtenidos, se amplía a Ibiza:

  • No se necesita dinero para hacer la recarga: tras darse alta en el servicio ecaR solo es necesario bajarse la aplicación, llegar al punto de recarga, acceder a él mediante la aplicación y cargar sin complejidades. También en caso de no estar dado de alta en ecaR es posible cargar sin ninguna complicación: simplemente hay que bajarse la app y pagar mediante la tarjeta de crédito, sin necesidad de tener un contrato firmado con Endesa. De esta manera se asegura la universalidad de acceso a la red.
  • Reserva de recarga: Con la aplicación es posible localizar el cargador más cercano, comprobar que está libre y reservarlo. También permite activar el GPS para que te lleve a su ubicación exacta.
  • Operación íntegra a través del móvil: Un vez delante del punto de recarga, se realiza la apertura del mismo desde la aplicación y se inicia la carga. Desde el móvil es posible interrumpir la recarga cuando se quiera y acceder a toda la información de facturas, reservas, etc. sin necesidad de contar con una tarjeta física RFID.

Alianza por la movilidad eléctrica

El acuerdo entre Smart y Endesa, firmado ya en marzo de 2017, está basado en 3 pilares principales:

  • Instalación de puntos de recarga para particulares. Con el objeto de facilitar la transición del consumidor al vehículo eléctrico, Mercedes-Benz España, representante en España de la marca Smart, ha integrado en su proceso de venta el suministro e instalación, por parte de Endesa, del equipo de recarga, con una garantía de dos años. La campaña lleva más de un año funcionando y ha demostrado ser un factor decisivo para aquellos clientes que quieren pasarse a la movilidad eléctrica: de manera sencilla el cliente tiene instalado un punto de recarga en su vivienda una vez ha comprado el vehículo Smart.
  • Creación de una tarifa en exclusiva, la TEMPO ZERO SMART por parte de Endesa. Los clientes de Smart pueden beneficiarse en exclusiva de energía con certificado renovable de forma gratuita. En concreto, se dispone de 1.200 kWh al año a 0 € para las cargas entre la una y las siete de la mañana, o, en términos de autonomía 8.000 km al año de forma gratuita.
  • Red de recarga de acceso público. Puesta en marcha de un proyecto de co-inversión para el despliegue de una red de infraestructura de recarga en varias localizaciones en España a partir de 2018. La infraestructura estará conectada a un centro de control que permitirá la localización, guiado y conocimiento por parte del usuario del vehículo eléctrico del estado de la misma. El sistema permitirá la operación y la atención ante incidencias de manera remota, ofreciendo una gran fiabilidad al usuario sobre el servicio.

Bigbank: «Las solicitudes de financiación de coches eléctricos aumentan un 100%»

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Durante el pasado mes de enero se triplicaron las peticiones de préstamos para la adquisición de automóviles eléctricos en comparación con las cifras contabilizadas en el último trimestre de 2017, según Bigbank.

La entidad financiera Bigbank ha experimentado un aumento de más del 100% en la recepción de solicitudes para la financiación de vehículos eléctricos, a través de su Préstamo Verde Vehículo Eléctrico.

La firma destacó que durante el pasado mes de enero se triplicaron las peticiones de préstamos para la adquisición de automóviles eléctricos en comparación con las cifras contabilizadas en el último trimestre de 2017, mientras que en lo que va de marzo ya se han superado las solicitudes de todo febrero.

Ante estos datos, el director general de Bigbank en España, Diego Azorín, afirmó que no hay duda de que cada vez hay un mayor interés hacia este tipo de vehículos y una mayor preocupación medioambiental, tal y como reflejan los datos de Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (Aedive).

«El coche eléctrico es ya una realidad, sobre todo en las principales ciudades españolas, donde el vehículo se utiliza para trayectos cortos, principalmente para ir al trabajo», aseguró el directivo.

El número de matriculaciones de vehículos eléctricos han aumentado durante el pasado mes, y es que, según datos de AEDIVE, en febrero se han matriculado 1.088 vehículos eléctricos, de los cuales 746 son vehículos puros eléctricos y 342 híbridos enchufables. Por el momento, ya hay un total de un millón de vehículos eléctricos matriculados en Europa.

Por provincias, Madrid vuelve a ser la ciudad donde más vehículos eléctricos se han matriculado, con 352 eléctricos y 391 híbridos enchufables, seguida de Barcelona con 140 y 104, respectivamente.

Según Arturo Pérez de Lucia, director gerente de AEDIVE, la asociación empresarial para el desarrollo e impulso del vehículo eléctrico y socia de Bigbank, “sin duda, los ratios de ventas demuestran que algo ha cambiado a positivo en la percepción social, empresarial e institucional en torno al vehículo eléctrico en estos meses y las previsiones hacen pensar que 2018 podría cerrar por encima de las 25.000 matriculaciones.”

«El coche eléctrico costará como el tradicional en 2020»

Entrevista Arturo Pérez de Lucia_coche eléctrico_AEDIVE

EXPANSIÓN – ENTREVISTA CON ARTURO PÉREZ DE LUCIA Director gerente de Aedive

Mientras Arturo Pérez de Lucia posa para esta entrevista en un punto de recarga de coches eléctricos, aparece un cliente, un taxista a bordo de un Nissan Leaf encantado de compartir su experiencia. Según dice el taxista, en dos años apenas ha dedicado 20 euros al mantenimiento del coche. El director gerente de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (Aedive) asiente ante este ejemplo práctico. Un taxista, afirma Pérez de Lucia, «puede compensar los menores ingresos que le generan Uber o Cabify si usa un coche eléctrico». Su asociación acoge desde fabricantes como Renault, Nissan, BMW o Tesla hasta eléctricas como Endesa o Iberdrola.

Abaratamiento

«Es previsible que para 2020 haya un equilibrio de precios entre los vehículos de combustión y los eléctricos, y que la tendencia a la baja sea mayor en los siguientes años», afirma el directivo al citar motivos para comprar uno de estos coches. El coste de las baterías ha descendido de unos 1.000 euros por kilovatio hora (kWh) en 2009 a apenas 200 euros en la actualidad, y este año podría caer a 100 euros. A esto se suma el fuerte aumento de su autonomía, que ya oscila en muchos casos entre los 300 y los 500 kilómetros.

Cuando se trata del mantenimiento, el coche eléctrico es «imbatible» frente al de combustión, sostiene el responsable de Aedive. Según dice, el ahorro puede llegar a 6.000 euros al año, lo que equivale a cerca de un 20% de un sueldo medio de 29.000 euros brutos al año. «Un coche eléctrico que haga unos 18.000 kilómetros al año dedica unos 275 euros a la carga, frente a los 2.460 euros del combustible. Por el seguro puede pagar 100 euros, frente a 700, y el mantenimiento es casi nulo, frente a 600 euros del vehículo convencional». A esto se suman el coste del aparcamiento, que en una ciudad como Madrid resulta gratuito.

Al margen de los cálculos entre coste y beneficio, Pérez de Lucia pronostica que este año se matricularán en España unos 25.000 vehículos eléctricos nuevos, prácticamente el doble de las 13.000 unidades de 2017, cuando también se duplicaron las cifras del ejercicio anterior.

«La tendencia es alcista porque los fabricantes están incorporando más modelos con mayor autonomía al tiempo que se despliegan más infraestructuras de recarga y se vencen las barreras del coche eléctrico», afirma el directivo.

Pérez de Lucia advierte de un «condicionante» en España que la diferencia de otros países con rápido despliegue del coche eléctrico, entre ellos Noruega. «Tenemos una gran industria tradicional de automoción y no se puede hacer una transformación tan acelerada». Sin embargo, defiende las ayudas públicas al impulso del coche eléctrico y recuerda la velocidad con la que se han agotado los fondos previstos para el Plan Movalt, tanto en lo referido a la compra de coches eléctricos como a la instalación de puntos de recarga.

El director gerente de Aedive también considera necesario «desmitificar» ideas sobre el coche eléctrico. Según dice, la red eléctrica está preparada para integrarlo masivamente sin disparar las emisiones de CO2.

De vuelta a los taxistas, considera que el coche eléctrico puede ser un referente para regular nuevos modelos de movilidad como Uber o Cabify. «Estaría justificado que los ayuntamientos apoyaran los VTC de cero emisiones. Eso los convierte en un servicio de valor añadido».

¿Cargar gratis en Ikea o en El Corte Inglés?

Una de las normativas de inmediata aprobación que más expectante tiene al sector es el nuevo real decreto del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital sobre el papel de los gestores de carga. Pondrá fin a lo que Pérez de Lucia califica de «hemorragia regulatoria», que es lo que ocurrió en 2011 con el lanzamiento de una norma cuando ni siquiera estaba disponible la tecnología. Esta precocidad convirtió la regulación en ineficiente. También pondrá fin a la «coagulación regulatoria» fruto de retrasar los cambios. El futuro decreto «eliminará muchas barreras» y permitirá a hoteles, centros comerciales o lugares de ocio «revender» electricidad en puntos de recarga. Sin embargo, no especifica con claridad si se podrá ofrecer la carga de forma gratuita, lo que abre una laguna legal. «Ikea o El Corte Inglés podrían usar la carga gratuita de coches eléctricos como potente reclamo».